¿El Clásico Barcelona-Real Madrid sera lo mismo con la ausencia de Messi?

 

BARCELONA — Leo Messi en Marsella y el Clásico en el Camp Nou. El 24 de octubre de 2021 pasará a la historia por ser el primer día desde noviembre de 2004 en que el astro argentino no vive como futbolista del Barcelona un enfrentamiento contra el Real Madrid

Seguirá, se supone, por televisión el duelo de LaLiga esperando a jugar en el Stade Vélodrome con el PSG, por la noche, ante el Olympique de Marsella. Un partido enorme, también, en Francia… Pero nada que ver con lo que se espera en el estadio azulgrana.

Barça y Real Madrid se han enfrentado en 245 partidos oficiales desde su primer cruce, explosivo (hasta cuatro partidos se necesitaron para clasificarse el Real), en las semifinales de la Copa del Rey de 1916. Antes, en 1902 (cuando el club merengue apenas tenía unos meses de vida) participaron en lo que se conoció como la Copa de la Coronación y que les enfrentó en las semifinales con victoria azulgrana por 3-1, pero no fue hasta marzo de 1916 que nació propiamente dicho el duelo, oficial, entre ambos clubs.

La historia señala que de esos 245 partidos oficiales el Real Madrid venció en 98, por 95 del Barça y empatándose los restantes 52. Una estadística que vivió diversas épocas… Y que entró en una nueva dimensión con la presencia de Leo Messi en las filas azulgranas.

Messi, con el dorsal 30, fue convocado por primera vez para un Clásico el 20 de noviembre de 2004, partido que venció por 3-0 el Barça en el Camp Nou (Eto’o, Van Bronckhorst y Ronaldinho) y desde entonces, con él en la plantilla, se jugaron un total de 50 enfrentamientos entre ambos equipos, con un saldo de 21 victorias azulgranas, 17 madridistas y 12 empates, con una cierta ventaja goleadora para el Barcelona de 92 goles marcados por 73 encajados.

Antes de ello, desde aquel mes de marzo de 1916, los dos equipos habían disputado 195 partidos, con la misma tónica igualada… pero ventaja merengue, que ganó 81 encuentros por 74 del Barça y empatando los 40 restantes. Y aventajando por 339 a 306 el cómputo de goles.

REGRESO AL PASADO

El del próximo domingo en el estadio azulgrana será el primer Clásico sin Leo Messi en la plantilla del Barça. El astro argentino disputó 45 de esos 50 partidos de su época, de los que venció en 19, perdiendo 15 y empatando los 11 restantes, debutando un inolvidable 19 de noviembre de 2005 en el Bernabéu, cuando el equipo que dirigía Frank Rijkaard venció por 0-3 en la famosa exhibición de Ronaldinho.

El último encuentro disputado por Messi ante el Real Madrid fue el 10 de abril de 2021, también como visitante (esta vez en el Alfredo Di Stéfano) y perdiendo el Barça de Koeman por 2-1. De hecho, aunque los números muestran que durante la era Messi el Barcelona pasó a ser dominador en los Clásicos, el equipo azulgrana, con él en el césped, perdió los tres últimos y acumuló hasta cuatro sin ganar. Nunca con el argentino en la plantilla el Barcelona había sido derrotado en tres Clásicos consecutivos…

Afirmó Karim Benzema durante una entrevista que el Clásico “sigue siendo el mejor partido que existe en el futbol” y que la ausencia de Messi en el encuentro no le resta ni pasión, ni trascendencia ni brillantez porque “la rivalidad entre Real Madrid y Barcelona es histórica” y va más allá de nombres concretos, de estrellas indiscutibles como ya las hubieron antes de la eclosión de Leo con la camiseta azulgrana… Pero es una evidencia que este próximo domingo habrá un vacío no recordado en el Camp Nou.

Con la pandemia del coronavirus controlada y recuperándose la normalidad, el estadio azulgrana abrirá sus puertas sin restricciones al público, esperándose que no menos de 90 mil aficionados se den cita en las gradas en el primer duelo contra el gran rival sin tener ese as en la manga que siempre significo el astro argentino para el Barcelona.

De los 45 partidos que jugó Messi con el Barça frente al Madrid se guardan en la retina momentos sublimes. Titular en 43 de ellos, anotó hasta 26 goles para convertirse en el máximo realizador de la historia del Clásico y nadie olvida su estreno goleador con un hat-trick el 10 de marzo de 2007 (3-3 como local). Como tampoco su doblete en el legendario 2-6 de 2009, sus dos goles en las semifinales de Champions de 2011 en el Bernabéu (0-2), su hat-trick en el 3-4 de 2014 o la tarde del 23 de abril de 2017, cuando alcanzó la mágica cifra de 500 goles con el Barça anotando por partida doble en el coliseo blanco para ganar 2-3 en el minuto 92 y mostrando, orgulloso, su camiseta al público…

Hay un antes y un después de Messi al hablar del Clásico porque es imposible no hacer referencia a ello. Entre 2009 y 2018 protagonizó un duelo estelar, planetario, con Cristiano Ronaldo defendiendo la camiseta del Real en 30 enfrentamientos de los que el Barcelona venció en 14 por 8 del Madrid pero su leyenda va más allá de los duelos entre los dos monstruos… Como lo fueran Kubala y Di Stéfano en la década de los 50 del pasado siglo en la única comparación posible de dos astros vestidos cara a cara en un terreno de juego defendiendo las dos camisetas.

Messi, sin embargo, superó todas las expectativas y su figura va mucho más allá de cualquier estrella del pasado y del presente… Y ya se verá si alguien es capaz de tomar su testigo en un futuro más o menos cercano.

El Clásico retomará este domingo un sabor olvidado en el tiempo. Muchos aficionados mantienen en su retina el duelo eterno entre Barcelona y Real Madrid con la indiscutible presencia del astro argentino y deberán empezar a acostumbrarse a no confiar unos o temer los otros por su magnificencia deportiva… Porque se volverá al pasado en que deberán aparecer otros futbolistas dispuestos a convertirse en la estrella del partido cumbre. Aunque sea por un solo día.

El héroe, el crack eterno, ya no será protagonista. 300 millas al norte, en el Stade Vélodrome de Marsella, jugará el mismo domingo por la noche con la camiseta del PSG un partido que jamás habría imaginado hasta que el 5 de agosto el Barça anunció que se había acabado su etapa en el Camp Nou.

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